Taken (2008) - Violenta búsqueda

La verdad no pensé mucho cuando vi el trailer por primera vez de la película de la cual hablo hoy, pero como me ocurre con muchas películas, mientras pasa un poco el tiempo y voy leyendo opiniones, me voy creando una imagen mental de lo que es el filme y termina interesándome cada vez más. Siempre he dicho que las películas que juegan con la temática de la venganza siempre han sido de mi mayor agrado. Encuentro una pura y muy natural dulzura cuando los personajes reciben la dulce miel del hecho de castigar horriblemente a alguien que les hizo mal. Filmes han tratado muy bien éste tema ha través de las décadas, claro que podemos recordar a "Death Wish" (El Vengador Anónimo, en México) protagonizada por Charles Bronson, también el épico de Quentin Tarantino, "Kill Bill" (Kill Bill: La Venganza, en México) también el electrizante relato de secuestro y retribución "Man on Fire" (Hombre en Llamas, en México) entre muchos otros títulos. Así también viene el filme en cuestión, "Taken" lanzada en México con el apto título "Búsqueda Implacable". El filme es dirigido por el realizador Francés, Pierre Morel, responsable del filme de acción "Banlieue 13" (Distrito 13, en México) la cuál confieso no haber visto ahora que escribo esto, pero definitivamente está pendiente. El filme es escrito por el fugaz Luc Besson, paisano de Morel, responsable de filmes como el tremendo thriller de acción "The Professional" (El Perfecto Asesino, en México) y "The Transporter" (El Transportador, en México) entre muchos otros. El guión es co-escrito por Robert Mark Kamen, escritor del filme futurista "The Fifth Element" (El Quinto Elemento, en México) y "Kiss of the Dragon" (El Beso del Dragón, en México). Entonces, volviendo a "Taken" el filme nos presenta al ex-agente del gobierno Bryan Mills (Liam Neeson) viviendo en Los Angeles, una vida tranquila, retirado, tratando de pasar más tiempo con su hija de 17 años, Kim (Maggie Grace) que vive con su madre Lenore (Famke Janssen) quién se ha vuelto a casar con un magnate empresario, Stuart (Xander Berkeley). Bryan pega el grito en el cielo cuando su hija le pide permiso para viajar a París con una amiga, sin supervisión de un adulto, pero sabiendo cuanto desea ir al viaje, Bryan acepta darle permiso bajo las condiciones que el dicte, que son estar en constante comunicación por teléfono para saber siempre donde está. Bryan desconfiado del mundo, deja ir a su hija en un vuelo a París. En cuando sale del aeropuerto las dos adolescentes ya están siendo aproximadas por un joven Parisino que parece ser amigable. Ya en el apartamento donde se quedan, Kim habla con Bryan por teléfono cuando se da cuenta que entran a la fuerza unos misteriosos hombres vestidos de negro que secuestran a su amiga, mientras Bryan habla con Kim por teléfono le da instrucciones sobre que hacer y rápidamente, después de que es secuestrada, Bryan amenaza al secuestrador misterioso al otro lado de la línea diciéndole que si dejan ir a su hija en ese momento, todo quedará atrás, pero si no... los buscará, los encontrará, y los matará. Así que en instantes, Bryan toma un vuelo a París, y usa todas sus habilidades como ex-agente del gobierno para voltear toda la ciudad, interrogando a todos, buscando donde sea, para poder encontrar a Kim, quién resulta haber sido secuestrada por una banda implicada en el tráfico de mujeres para prostitución. La pesadilla de todo padre. "Taken" es un filme efectivo por ciertas cualidades, que en mi opinión hace mas triste el hecho de que haya fallado un poco en algunos aspectos, porque si se hubieran cambiado un par de cosas, podríamos tener un filme verdaderamente extraordinario en nuestras manos. Pierre Morel es un director con un ojo hiperactivo y trata las escenas de acción como ataques epilépticos de cortes fulminantes y ángulos cambiantes, pero lo hace con un dinamismo saludable y aunque no veamos exactamente donde Neeson aterriza sus golpes sabemos que está haciendo a cada bastardo que muele a golpes, sufrir gran dolor. El filme tiene méritos ya que la historia no se atasca en lugares innecesarios y todo ocurre de manera muy veloz, la película dura escasos 93 minutos que corren a toda velocidad, además que la acción es sólida y bien filmada. Aún que la película cargue una clasificación Estadounidense PG-13, Morel se encarga de hacerla lo más violenta y sugerente posible, ya que si fuera R hubiera sido aún más brutal pero no menos atrevida. La película sufre de no ahondar mucho en su temática principal, y no me quejo de que la película no se haya convertido en un docuemental sobre el tráfico de mujeres y haya tomado una actitud moralista ante todo esto, ya que a mis ojos, la película trata el tema como un fondo para una historia de acción y venganza, que está bien hecho, lo que yo pensé es que tenía el potencial de haberse ido un poco más profundo y haberse hecho un poco más perversa y la audiencia hubiera encontrado el descenso que Bryan hace al infierno de criminales Europeos mucho más aterrador, en vez de eso pierde el tiempo mostrando una muy trillada subtrama de traición y corrupción gubernamental. También el primer acto cuando nos muestran la relación que tiene Neeson con su familia y amigos se ve un poco cliché y no muy bien escrita, todo huele muy familiar, el agente retirado cuya profesión lo tortura y le ha quitado mucho, sus amigos que lo quieren de vuelta en acción, etc.Las actuaciones son lo suficientemente decentes creo, con Liam Neeson dándole una especie de legitmización a la película siendo un actor de corte "serio" haciendo un papel trillado de superespía encabronado. Aún así con el papel de Bryan Mills, Neeson se las ingenia para tratarlo lo mas realista posible con un resultado de un híbrido raro entre Jason Bourne y Jack Bauer. Un implacable personaje que llega a lugares que no esperabamos, y claro yo como audiencia estaba muy feliz de ver eso. Disfrtuable sin duda. Maggie Grace con ya 23 primaveras interpretando a una chiquilla de 17 años es fastidiosamente mala en su papel actuando demasiado obvio como "niña pequeña" y realmente no tuve lástima por el personaje cuando fue secuestrada por la pandilla villanezca de malandrines. Famke Janssen tiene el papel deshechable de la malencarada ex-esposa de Liam Neeson, quién se encarga de insultarlo y tratarlo mal 99% del metraje. Xander Berkeley en otro papel deshechable de probablemente 30 segundos de tiempo en pantalla como el ricachón padrastro de la hija de Neeson. El siempre bienvenido Leland Orser interpreta a Sam, un colega del personaje de Neeson, que le da la mano para ayudarle en su búsqueda. El resto del elenco son básicamente desconocidos pero que hacen su parte bien. "Taken" es básicamente entretenimiento palomero con un protagonista sólido, con una dirección correcta, y un libreto más o menos escrito, ya que toca bases ya muy vistas, diálogo algo interesante, y situaciones entretenidas, y claro, ambientado en una temática interesante, pero explorada muy pero muy superficialmente. Una historia de venganza, (ese es su título en España, "Venganza" que aunque no es una traducción literal, es apto también) que se maneja demasiado rápida y fugazmente, pero para muchos esto es su atractivo. Para mí es lo que la hace funcionar y también su maldición, porque al mismo tiempo que la hace entretenida de ver, creo que es culpable de que la audiencia la olvide poco después de verla. Aún así, no está de más recomendarla para pasar una hora y media entretenida viendo a Liam Neeson con sus puños y pistola reducir la población de París un 10%.

"I will look for you, I will find you, and I will kill you" - Bryan Mills