ATENCIÓN

Queridos lectores,

Este espacio a evolucionado a algo un tanto diferente, los invito a que me continúen leyendo en mi nuevo blog, titulado Totally Unrated 2.0

Saludos y hablemos de cine.

lunes, 29 de diciembre de 2008

Pride and Glory (2008) - Un policial algo genérico y trillado

El género policiaco está entre los géneros (o subgéneros) de cine que más disfruto, nunca me canso de verlos, pero también espero que cada uno se distinga del otro en aspectos interesantes como los personajes, actuaciones, giros en la historia, etc. Cuando vi el anuncio del filme del que hablo hoy, realmente sentí un ansia por verla porque sabía que sería material de calidad. La película a la que me refiero es el thriller/drama policiaco, “Pride and Glory” (Código de Familia, en México). Viniendo de un director del cual no conozco ningún trabajo, Gavin O’Connor, aún así no dudé en echarle un vistazo debido a que el libreto fue co-escrito con Joe Carnahan, director de uno de mis filmes policiacos favoritos (si no es que es mi favorito), “Narc” (Calles Peligrosas, en México). La historia de “Pride and Glory” empezó sonándome bastante cliché y familiar, y ahí empecé un poco a dudar, pero a fin de cuentas la historia nos sitúa con el Detective Ray Tierney (Edward Norton), miembro de una familia de policías multigeneracional, que incluye a su padre Francis (Jon Voight), y a su hermano mayor Francis Jr. (Noah Emmerich) y a su cuñado Jimmy Egan (Colin Farrell), quién es patrullero. Trabajando detrás de un escritorio, Ray es empujado de vuelta a las trincheras cuando 4 policías que ejercían bajo el mando de su hermano fueron asesinados en un violento tiroteo. Ray tratando de encontrar al asesino irá develando una red de corrupción que no solo involucra a su cuñado Jimmy, sino al departamento de Policía de Nueva York en general. Como mencioné a mi me gustan mucho las películas policiacas, y puedo empezar diciendo de una vez que yo disfruté “Pride and Glory” pero al mismo tiempo digo ahora mismo que esperaba un poco más, tal vez esperaba un poco más de química y explosión entre ambos actores Edward Norton y Colin Farrell, a quienes respeto y creo que tienen buenísimas películas (uno más que el otro, claro), pero creo que la combinación de talentos aquí fue dentro de lo que cabe, algo desperdiciada, ya que las actuaciones fueron un poco genéricas. Claro que Edward Norton siendo el sólido interprete que es hace lo que puede con un rol que aunque los escritores tratan de darle dimensión se siente como un héroe de caricatura, con “principio moral” escrito en la frente, simplemente no lo sentí del todo creíble. Colin Farrell dio una interpretación mediocre, siempre preocupado, fumando su cigarrillo constantemente viendo mucho hacia arriba y viéndose consternado, Farrell cumplió menos con su papel. Jon Voight si logró mantenerse a flote interpretando a un viejo orgulloso, prepotente y que siempre pone a su trabajo y su reputación encima de todo, y la verdad debo decir que me sorprendió ver al actor menos conocido de todos Noah Emmerich dando una sólida actuación con el personaje más interesante de la película creo yo, Francis Jr. quién es un policía de motivaciones algo ambiguas. O’Connor y Carnahan trataron de inyectar un poco de drama tangible en la película metiendo a fuerzas escenas que se veían dolorosamente cosidas en la historia como la inservible subtrama del personaje de Norton visitando a su esposa dejándole regalos de navidad poco antes de divorciarse, o también las interacciones del personaje de Emmerich con su esposa enferma de Cáncer. Creo que fue todo demasiado forzado algunas veces, el tono del personaje se puede establecer mediante diálogo y situaciones más sutiles como lo hizo Carnahan tan eficientemente con el personaje de Ray Liotta en “Narc”. Algo que si tiene “Pride and Glory” es una atmósfera fría, sucia y se siente bastante real, de lo que es Nueva York y sus partes menos privilegiadas, ya que no todo son luces y atracción. Debo decir que me molestó un poco como al principio O’Connor maneja una secuencia como si fuera grabada en el estilo muy de moda de “cámara en mano” ya que yo no lo esperaba y me estuvo distrayendo bastante al principio pero después fue disminuyendo y todo estuvo mejor. Quiero pensar que O’Connor lo incorporó para darle una especie de tono realista/documental a la película que sirvió ya que su atmósfera daba bastante para ello. Pero, al final de todo de lo que sufre “Pride and Glory” es del hecho de ser bastante genérica, desde su título hasta su historia, la película no hace mucho para hacerse distinguir entre las demás películas de su género, con una base narrativa muy parecida a “We Own the Night” (Dueños de la Noche, en México) con lo de la familia de policías y esos enfoques, y además retachando el tema de la corrupción vil que infecta todo el cuerpo de policía, que ha sido tratado en muchísimas otras películas, poniendo de ejemplo a “Street Kings” (Reyes de la Calle, en México) de este mismo año para no irnos muy lejos. Como mencioné anteriormente, yo disfruté “Pride and Glory” por lo que es, pero el hecho de haber visto más de un par de cintas policiacas y ser seguidor del género hace que la experiencia sea un poco menos interesante, ya que se siente muy vista y decepciona un poco que no haya sido más ambiciosa.
"Don't talk to me about the truth. You got no idea what it takes to do what we do." - Ray Tierney

miércoles, 24 de diciembre de 2008

Gran Torino (2008) - El auto que los une

Todos sabemos que al mismo tiempo que el genial Clint Eastwood ha sido un actor tremendo y tiene una carrera trascendental en el medio, habiendo trabajado con directores como el Italiano, Sergio Leone en los excelentes westerns conocidos como La Trilogía de los Dólares, y también dejando su marca con su personaje del implacable detective de la policía Harry “El Sucio” Callahan que tuvo varias películas, Clint Eastwood también ha sido un cineasta bastante trabajador. Últimamente, Eastwood ha dirigido películas como la tremenda historia “Mystic River” (Río Místico, en México) y la más inspiradora, pero para mí, un poco menos acertada “Million Dollar Baby” (Golpes del Destino, en México). No solo últimamente Eastwood ha dirigido sólidas cintas, sino también tiene “Unforgiven” (Los Imperdonables, en México) de 1992 y “A Perfect World” (Un Mundo Perfecto, en México) de 1993. Ya poniendo el nombre de Eastwood en contexto (aunque muchos que lean esto no lo necesitan) podemos brincarnos a la parte del año 2008, donde Eastwood lanzó dos películas de su realización, “Changeling” (El Sustituto, en México) y “Gran Torino”. Yo hablaré acerca de una de ellas. Se había dicho que Eastwood había hecho su último papel como actor en el año 2004, con “Million Dollar Baby” pero ahora 4 años más tarde podemos verlo de nuevo en pantalla en “Gran Torino”. El filme es dirigido y producido por Clint Eastwood, partiendo de un guión de Nick Schenk, de quién no conozco ningún trabajo. La historia se sitúa en Michigan, donde encontramos al gruñon veterano de la guerra Coreana, Walt Kowalski (Clint Eastwood) asistiendo al funeral de su esposa de muchísimos años. Los hijos de Walt son buenas personas, pero al mismo tiempo algo interesados y egoístas, principalmente su hijo mayor, sus nietos son irrespetuosos y traviesos. Encima de eso Walt nunca ha sido un hombre muy familiar o en contacto con sus sentimientos. El vive en un vecindario lleno de personas Asiáticas, particularmente de las llamadas Hmong, de diferentes regiones de Vietnam, y otros lugares. Naturalmente, Walt es algo racista en especial contra las personas de ojos rasgados, ya habiendo sobrevivido la guerra contra Corea. Un día su vecino, un joven Asiático llamado Thao (Bee Vang) trata de robarle a Walt desde su propia cochera, su precioso auto restaurado, un Gran Torino de 1972 en perfectas condiciones. Después de frustrar el robo, Walt se da cuenta que una de las pandillas de Asiáticos locales ha estado hostigando a Thao para que se una a ellos y el robo del Gran Torino era parte de la “iniciación”. Así, Walt renuentemente al principio empieza a relacionarse con la familia de Thao, incluyendo su hermana Sue (Ahney Her) y la cultura Asiática, también se da a la tarea de asegurarse que las pandillas dejen en paz a los indefensos, especialmente a Thao a quién Walt empieza a llevar de la mano por el camino de una vida decente y trabajadora. “Gran Torino” es una película que no carga a simple vista temas muy escabrosos como por ejemplo los tenía “Mystic River”, pero aún así el libreto logra la inclusión de debates religiosos y sobre la vida y la muerte con el personaje del Padre Janovich, interpretado correctamente por Christopher Carley, un sacerdote de 27 años recién salido del seminario que hostiga a Walt pidiéndole que vaya a confesar sus pecados porque su esposa se lo pidió como favor, antes de morir. El diálogo que escribió Nick Schenk que intercambian el personaje del Padre y Walt, creo yo que fue el más interesante de toda la película y funcionó para darle una gravedad emocional un poco más profunda que lo que simplemente vemos transcurrir en pantalla. Eastwood maneja “Gran Torino” como más que nada la relación que sostienen los dos personajes principales, que serían Walt y el joven Hmong llamado Thao, y como esa relación va cambiando y fortaleciéndose mientras pasa el tiempo, como ambos personajes van encontrando lados de si mismos que no conocían. En este caso, el título de la película es “Gran Torino” ya que este auto es pieza clave en la historia en como la relación principal entre los personajes, y la que carga la película se lleva a cabo a partir del auto. De alguna manera tenemos la noción que el filme es una especie de conmovedora historia de dos personajes encontrándose pero al mismo tiempo cimentada por un esqueleto narrativo de una historia de venganza, retribución y sangre derramada, al menos eso podemos inferir cuando vemos como Clint Eastwood se convierte en un tipo “vigilante” o “vengador” al enfrentarse sin miedo a las peligrosas pandillas de su inestable vecindario. Y hablando en serio, soy muy gran fan de las historias de venganza, pero lo que admiro de “Gran Torino” es que su historia abarca mucho más que eso, y llega a lugares que a fin de cuentas son más importantesLas actuaciones de la película son correctas, con un Clint Eastwood en plena forma interpretando a su natural esencia en pantalla de viejo cascarrabias con un gran corazón detrás de todo el enojo. Ya la sabemos. Las sorpresas aquí vienen del elenco de reparto que Bee Vang quién interpetó al joven Thao, funcionó de manera bastante natural como su personaje (a excepción de un par de escenas) y Ahney Her también fue realmente carismática como la joven Sue. Christopher Carley como ya mencionamos trajo a la película de las escenas mas interesantes. Creo yo que sería fácil para alguien tomarse “Gran Torino” bastante a la ligera a comparación de otras películas con más carga que haya dirigido Clint Eastwood, pero creo yo que esta es una historia sincera, sin mucha complicación y que funciona, sobre todo entregando un desenlace que es correcto sin ser necesariamente lo que uno esperaba o quería ver. Para no ahondar en detalles que puedan cuartear la experiencia, mejor digo que “Gran Torino” tiene muy merecido un vistazo, a mi me encantó.
"Ever notice how you come across somebody once in a while you shouldn't have messed with? That's me." - Walt Kowalski

lunes, 15 de diciembre de 2008

Body of Lies (2008) - Engaño en el Medio Oriente

Ya son varias las películas que afincan su trama en el conflicto actual que hay entre Estados Unidos y el Medio Oriente, algunas son buenas, aunque tratan el asunto un poco más como película de acción como “The Kingdom” (El Reino, en México) pero sin perder nunca la seriedad de la película y algunas son más dramáticas o para ser mas tomadas en serio, por así decirlo como “Rendition” (El Sospechoso, en México) ambas del 2007. La más nueva viene de la orden del talentoso cineasta inglés Ridley Scott, con “Body of Lies” (Red de Mentiras, en México). Scott es uno de mis directores favoritos siendo el responsable de varias películas bastante sólidas como lo son los clásicos “Alien” (Alien: El Octavo Pasajero, en México) y “Blade Runner”, pero su filmografía habla por sí sola. El filme es basado en la novela homónima de David Ignatius y el libreto fue adaptado por William Monahan, ganador del Oscar por el genial guión del galardonado remake del filme Chino “Infernal Affairs” conocido como “The Departed” (Los Infiltrados, en México). El tema que trata la película me llama bastante la atención, y junto con el buen elenco y el equipo talentoso tras de ella, no dude en verla en la pantalla grande cuando se me presentó la oportunidad. El filme nos sitúa con el agente encubierto de campo de la CIA, Roger Ferris (Leonardo DiCaprio) asignado al Medio Oriente para desmantelar una célula terrorista que ha causado bombardeos con alto índice de muertos en distintas partes de Europa, liderada por Al-Saleem (Alon Abutbul). Ferris responde directamente al jefe de la división del Medio Oriente en la CIA, Ed Hoffman (Russell Crowe), un burócrata a quién no le importa mucho el valor de la vida humana siempre y cuando sea bajo la impresión de que se están salvando vidas. Bajo la tutela de Hoffman, Ferris trata de infiltrar a agentes dentro de la célula terrorista colaborando con el jefe de seguridad nacional de Jordania, Hani (Mark Strong), pero al haber un poco de enemistad entre la inteligencia Jordana y la CIA, Ferris tendrá que entretejer un plan de engaños e incriminaciones para poder lograr su objetivo, aún cuando arriesgue su propia vida y la vida de los que lo rodean. El paso que tiene la película es constantemente agitado y debo darle mis respetos a Ridley Scott para mantener la tensión y la relación estrecha entre los dos personajes principales al mantenerlos la mayoría de la película en países diferentes. Claro, el personaje de DiCaprio y Crowe si comparten algunas escenas juntos pero muchas de las situaciones claves ocurren cuando DiCaprio se encuentra esquivando balas en el Medio Oriente hablando por celular con el personaje de Crowe quién se encuentra comiendo cereal en su casa o llevando sus hijos a la escuela cómodamente en Estados Unidos. El tema central en el que se basa el conflicto de la película, como su título lo sugiere es el engaño y como a veces se tienen que traicionar a los supuestos aliados y amigos en la guerra contra el terrorismo, pero creo yo que la película también sostiene la idea de que a veces el ingenio y el saber usar a las personas sirven más que la tecnología y los recursos monetarios para alcanzar un fin. “Body of Lies” contiene un par de escenas de acción bien ejecutadas como ya sabemos, Scott es bueno con la cámara y los ángulos y sabe exprimirle tensión y realismo a este tipo de escenas, siendo violento sin pasarse de la raya a lo ridículo y teniendo bastante éxito. La historia a veces puede ser un poco truculenta al seguir al perderse uno entre tantos nombres árabes y engaños tras engaños, pero al final todo cae donde debe de caer y uno esa satisfecho con su planteamiento. La cinematografía cambia entre el amarillo polvoso del Medio Oriente a un azul tranquilo, pacífico y hasta a veces deprimente en los ambientes Estadounidenses y creo yo que hicieron contraste de una manera tremenda. Hasta la estética de los personajes principales tienen una contraposición bastante acertada poniendo al personaje de DiCaprio con una barba algo crecida, vestido de manera incongruente, sucia, y malencarado y el personaje de Crowe muchas veces en bata, con su cabello corto, complexión gorda (Crowe subió unos cuantos kilos para este papel) y su aspecto burócrata impecable. Los actores hicieron su parte bien, DiCaprio como siempre en forma, y Crowe marcando ya su cuarta colaboración con Ridley Scott lo hace bien, exagerando su acento Estadounidense falso pero dando un performance odioso bastante efectivo. Mark Strong resulta siendo la sorpresa aquí teniendo igual tiempo en pantalla (o más) que el personaje de Crowe, interpretando a Hani, pieza clave en la historia y jefe de seguridad nacional Jordana, su diálogo siempre fue certero, bien escrito y dio una actuación tan acertada que hasta a veces daban escalofríos sus escenas, tremendo personaje. Al final “Body of Lies” es un thriller de espionaje bastante efectivo, aunque no tiene algo particularmente único o algo que lo haga resaltar de las otras películas que se ambientan en esta temática. Eso no dice que es una película mala, por supuesto que tiene bastantes escenas muy memorables (como la del martillo en los dedos, entre otras). Recomiendo esta película con todas las de ley, realmente vale la pena un visionado para ver sólida dirección, sólidas actuaciones y una historia bastante bien armada.
"No one is innocent in this shit." - Ed Hoffman

sábado, 13 de diciembre de 2008

Saw V (2008) - La sangre se derrama, pero ¿todavía nos importa?

El cuento parece nunca acabar al pasar otro año y, como es de esperarse una nueva entrega de la muy lucrativa serie de horror, “Saw”. Éste 2008 viene la quinta parte justo a tiempo como han sido lanzadas al público desde el estreno de su muy exitosa primera parte en Octubre del 2004. Ya para mí se ha hecho una tradición ir a ver estas películas al cine aunque para ser sincero voy perdiendo el interés cada vez más en ésta ya muy cansada franquicia, pero siguiendo con la costumbre fui a ver “Saw V” (El Juego del Miedo V, en México) a la pantalla grande y realmente no salí muy emocionado que digamos. La batuta de director es pasada a David Hackl, quién fue director de segunda unidad para Darren Lynn Bousman en “Saw III” y “Saw IV” y aquí Hackl debuta como director con la quinta parte de la franquicia. No puedo criticarle mucho la dirección a Hackl, ya que emula bastante bien lo que Bousman y James Wan cimentaron bien desde la primera película, el estilo agresivo de las tomas, la edición fuerte y epiléptica, las tomas en cámara rápida que pueden volverse fastidiosas, etc. El libreto al igual que en el filme pasado, está a cargo de Patrick Melton y Marcus Dunstan, quienes también son responsables del buen filme de horror “Feast” y su horrible secuela “Feast II: Sloppy Seconds”. Sin más preámbulo, la historia de “Saw V” al igual que sus filmes predecesores continúa cuando la última película acaba recontando un poco los eventos. Jigsaw (Tobin Bell) está muerto, aunque podemos ver sus fechorías y maléficos planes a través de numerosos flashbacks. El cómplice y aprendiz encargado de continuar su trabajo es el agente del FBI, Mark Hoffman (Costas Mandylor) y él ha puesto un nuevo juego en movimiento, incluyendo a 5 nuevos jugadores dentro de un complejo de pesadilla que tendrán que trabajar juntos para poder sobrevivir las trampas de Jigsaw. Mientras tanto, el Agente del FBI, Peter Strahm (Scott Patterson) no está tan seguro de que Hoffman sea tan inocente como dice ser, ya que es el único que escapó ileso del incidente del filme pasado, así que desobedeciendo a sus superiores decide investigar si él es el cómplice del difunto Jigsaw, no importa que tan peligroso sea hacerlo. ¿Qué se puede decir sobre una película llamada “Saw V”? No mucho desgraciadamente, creo que parte de lo que hace que las secuelas sean interesantes es reinventar la rueda y agregar nuevas formulas, nuevos personajes, nuevos giros en la trama, y podríamos decir con seguridad que la franquicia en cuestión hace esto bastante bien, o al menos lo intenta. El problema creo yo es que esta serie de películas ha afincado su atracción en (además de sangre, gore y escenas de tortura) el hecho de que sus finales son giros que no te esperas y por eso cada vez subimos el estándar para algo más y más interesante y sorprendente. Por eso mismo tiene que haber un momento en que decepcione. Para mí, “Saw V” es la película más aburrida de la serie y con el giro final más esperado y soso, yo he sido bastante tolerante con estas películas al dejar pasar su montón de incoherencias y facilidades con las que ocurren ciertas cosas en su historia solo para mantenerla andando, pero creo que a veces es demasiado, especialmente cuando el llamado payoff final no es nada interesante. Para mí, todos los finales de las películas de “Saw” han sido emocionantes y me dejan enganchado como espectador (en mayor o menor manera) a ver la película que sigue, incluso el final de “Saw IV” del año pasado, creo que fue uno de los finales menos esperados y dentro de lo que cabe, mejor construido en términos de concordancia con los hechos (aunque estoy seguro que también tiene una o dos contradicciones), pero en fín, la película funcionó para mí. En “Saw V”, Hackl hace lo que puede para mantener el ritmo y el suspenso pero simplemente el peso de la historia recae demasiado en detalles de filmes pasados y recuentos y sospechas que nos empiezan a cansar como audiencia y la verdad, como ya mencioné, el giro final en su trama no nos dice nada, no nos deja nada, no nos engancha para la inevitable “Saw VI”. El filme en sí, tampoco es tan violento (creo yo) como algunos de sus predecesores, no tiene tanto impacto como mucha escenas de las películas anteriores como el pozo de jeringas en “Saw II”, o la cirugía de Jigsaw en “Saw III”. Aquí, “Saw V” se enfoca en tratar de mantener las cosas frescas con nuevas trampas que resultan siendo ya algo aburridas, comenzando con la primera con la que abre la película, que involucra un péndulo con una cuchilla y una máquina para destruirte tus propias manos. Las actuaciones son normales para este tipo de películas, Costas Mandylor hace su mejor esfuerzo para verse amenazante, y a veces no tiene mucho éxito. Scott Patterson aplica el “policía valiente y rebelde” y funciona hasta cierto punto, Julie Benz aquí es la “chica principal” en problemas y hace lo que puede, y el talentoso Carlo Rota tiene un rol muy reducido aquí, yo esperaba que fuera un poco más larga su aparición, y claro el grandioso Tobin Bell con cada vez menos participación en pantalla. En mi opinión, “Saw V” muestra más que nunca como la franquicia se va extinguiendo ya que su combustible se acabó, las trampas ya no impactan, los personajes dejaron de importar hace mucho, y el personaje clave de Jigsaw apareciendo solo a través de flashbacks y con cada vez menos participación en la historia. En lo personal, a mi me da igual si “Saw VI” ocurre o no, yo creo que si, pero no la espero, ni me interesa ver como concluye o continua esta historia. A estas alturas, creo que a muchos ya nos han perdido.
"Murder is distasteful" - Jigsaw